Los orígenes de la empresa, se remontan al año 1948, cuando Fernando Lillo Escorza da sus primeros pasos en el rubro, organizando la primera empresa que por esos días se aventuraba en Chile.
Con esta experiencia, como base, con sacrificio y un gran espíritu emprendedor la empresa Decorados y Satinados Fernando Lillo empieza su camino como empresa de marcada configuración familiar hacia el año 1966, luchando por posicionarse dentro del mercado.
Con el correr de los años, la empresa necesariamente debe reaccionar a los nuevos tiempos, buscando, permanentemente, un estatus de empresa moderna competitiva e innovadora. Para el año 2010, tanto padre como hijos, en una senda modernizadora, constituirán la actual empresa Decoin.